Los labios pueden ser superiores o inferiores y son la punta de la mucosa que recubre la boca, pero solo en los humanos aparecen al exterior.
Los labios forman la mucosa que recubre la boca y pueden ser superiores o inferiores. Sus características dependen de la herencia genética del individuo.
En la región labial externa hay un folículo piloso, glándula sebácea, glándula sudorípara , mucosa con queratina y tejido conjuntivo denso. Ya en su interior tiene una mucosa y glándulas salivales.
En su irrigación encontramos la arteria facial, que alimenta la arteria labial superior, situada detrás del músculo orbicular de los labios. En cuanto a la arteria labial inferior, también está irrigada por las arterias labial inferior y labiomentoniana.
Características generales de los labios.
Los labios son los extremos de la mucosa que recubre la boca, y se dividen en superior e inferior. La boca está formada por los dientes , la lengua, las encías, el paladar [cielo de la boca], las mejillas y los labios. Este conjunto trabaja en armonía para iniciar el proceso digestivo . Y es por herencia que el individuo adquiere las características de los labios, a saber: color, anchura y forma. Las personas de raza negra generalmente tienen labios más gruesos y oscuros que las de color claro.

La región interna de los labios es húmeda, ya que allí se ubica la mucosa labial. Pero también está la zona de transición, ya que hay una parte seca, que es el enrojecimiento de los labios. Por último, tenemos la parte exterior, que es donde está la piel.
Es importante recalcar que entre la región interna y la zona de transición existen fibras musculares del músculo orbicularis oris. Estas fibras sirven para separar dos compartimentos de grasa que son el superficial y el profundo.
Otra característica de la región labial es que contiene ciertas estructuras entrelazadas de las que sobresalen tres tubérculos. Está el tubérculo lateral derecho, el superior, así como el lateral izquierdo. Y sobre tales estructuras, es necesario decir que tienen áreas de proyección y áreas de huecos entre ellas.
La histología de la parte externa de los labios.
En el exterior de los labios encontramos: folículo piloso, glándula sebácea, glándula sudorípara, mucosa con queratina y tejido conjuntivo denso. Y es necesario hablar un poco de cada uno de ellos, ya que queremos conocer la histología de los labios.
El llamado folículo piloso se puede conceptualizar como una estructura dérmica tegumentaria que contiene tres vainas o vainas epiteliales. Como su nombre nos dice, tiene propiedades capaces de producir pelaje. En lo profundo del folículo piloso se encuentra la vaina de la raíz epitelial interna, que está revestida por el epitelio externo. Finalmente, en el exterior, está el radicular dérmico. Las vainas del folículo cubren la raíz del cabello dentro de la piel.

Es importante conceptualizar, en este momento, el llamado folículo pilosebáceo. No es más que un folículo piloso, solo que con una glándula sebácea adherida. ¿Y qué sería esta glándula sebácea? Se asienta sobre la piel y secreta una sustancia llamada sebo, que es lo suficientemente aceitosa para la lubricación.
La glándula sudorípara es aquella por la que el canal excretor elimina su contenido en los poros de la superficie de la piel. También existe en el exterior de los labios una mucosa que contiene queratina, es decir, una proteína con elasticidad. Por último, está el tejido conjuntivo denso, una región del tejido conjuntivo donde hay gran cantidad de fibras de colágeno, responsables de su considerable resistencia.
La histología de la parte interna de los labios.
En la región interna de los labios se encuentran una mucosa y glándulas salivales. Esta mucosa recubre la cavidad oral, pero no tiene queratina y siempre está húmeda con saliva. En cuanto a las glándulas salivales, están presentes tanto en la lengua como en los labios. Producen diversos elementos que actúan en la defensa del organismo humano, como anticuerpos y linfocitos. En el interior labial aún se encuentra el músculo esquelético, que le da resistencia como si fuera un esqueleto.
Hagamos una pausa aquí para explicar qué es el tejido conectivo. Es un tejido conectivo, es decir, llena los vacíos entre otros tejidos, los sostiene y los nutre. Su composición incluye muchas matrices extracelulares, fibras y células.
Este tejido conectivo es abundante en la parte externa del labio, mientras que en la parte interna es menos denso. Esto se debe a que la parte externa tiene que ser más resistente, ya que está expuesta a factores externos al cuerpo.
las arterias labiales
Es de la arteria facial de donde provienen las arterias de los labios. En relación con el labio superior, existe la llamada arteria labial superior, que se encuentra detrás del músculo orbicularis oris. De ella salen ramas perforantes que llegan a la piel, y otras que van a la parte roja y la mucosa bucal.

La arteria labial inferior, además de la arteria facial, también está irrigada por las arterias labial inferior y labiomentoniana. En cuanto a esta última, se pueden observar dos ramas, a saber: arteria labial horizontal y arteria labial vertical. La arteria labial inferior irriga mejor el labio inferior.
Las funciones de los labios.
El hombre es el único animal que tiene los labios hacia afuera, ya que en los demás seres vivos, cuando los tienen, están hacia adentro. El ser humano aprendió a succionar la leche materna con los labios, lo que supuso una revolución para la especie. Y prueba de ello es que basta con encajar al recién nacido en el pecho de la madre para que ya pueda realizar la succión. La capacidad de nacer sabiendo succionar se llama reflejo primitivo.
Usamos constantemente los labios también para hablar, ya que hay consonantes labiales. Están las consonantes de articulación bilabial, que son las que se articulan con ambos labios. Pero también los hay con articulación labiodental, es decir, aquellos cuya articulación involucra el labio inferior y los dientes superiores. Finalmente, los labios también se usan para besar.
¿Tu sabia?
- La región labial, que siempre está seca, puede incluso resecarse y agrietarse con tiempo frío.
- Cuando silbamos, el aire exhalado hace vibrar los labios y así produce el sonido.
- La forma y el contorno de los labios pueden revelar la personalidad de una persona.
¿Qué te pareció saber más sobre tus labios? Entonces echa un vistazo a este otro texto sobre el Sistema Linfático .